Líneas fuera de libreto IV

— No pasa nada, ninguno de los dos puede superar sus modales
— ¿Es ese el único impedimento?
— Sigo sin entender que te preocupa tanto…
— ¡Exactamente!

fuera de libreto III

Ella
-Quiero decirte-
El
-Si. Necesitaba tiempo-
Ella
-Meses es tu plazo-
El
-Perdón, lo sé-
Ella
-Hablemos. Estás listo hoy-
El
-Está bien-
Ella
-Estoy enamorada-
El
-Ya lo sé-
Ella
-Ahora lo se yo-
El
-Me da miedo tocarte-
Ella
-A mi ya no-
El
-Tocame-
Ella
-Te toco-
El
-No puedo-
Ella
-Te deshaces-
El
-Si…-
Ella
-Tengo cabeza-
El
-Coger-
Ella
-Ya no podemos-
El
-Te quiero-
Ella
-Gracias. Tengo cabeza-
El
-Te veo y miro-
Ella
-Tus ojos son más claros-
El
-Buscame-
Ella
-No-
El
-Ahora-
Ella
-Si-
El
-¿Me voy?-
Ella
-Si-
-Te quiero.-
El
…

.

Lineas fuera de libreto II

Yo -¿Viste lo irónicos que son?
Ella – Sí, algo.
Yo - Quiero matar a alguien ¡ya!.
Ella – Quiero matar al que me critica
Yo - Por lo menos, vos sabes a quien
Ella – Eso, solo me da más posibilidades de ser asesina


Ella – Quiero destruir lo que cree.
Yo - ¿Por?
Ella – Porque me agoté de ver malas interpretaciones y quejas
Yo – El problema es del otro, no tuyo
Ella – Me agota igual
Yo – Deberían pedirte perdón, por no tener la información suficiente para traducirte (!Ups! ...gracias)
Ella – Por eso, después, cancelamos los comentarios
Yo – Igual, siempre alguien termina ofendido
Ella – Y… se
Yo - Mudàte
Ella ¿Cómo?
Yo – Abandoná lo que creaste, con los que participan en ella. Inventá algo nuevo.
Ella – ¿Destruir para construir?
Yo - En algún momento, se van a encargar de destruirlo sin vos
Ella – Me gustó


Ella - ¿Cómo es?
Yo – Neti neti
Ella – La diferencia es que lleva más tiempo
Yo – Dificultades…
Ella – Inabarcable¿?
Yo - Insalubre
Ella – ¿Y lo no verbal?
Yo – Para eso necesito cooperación
Ella – Voluntad cooperativa
Yo - Cierto.

Ellos - Si no venís, se destruye todo
Ella - No cuenten conmigo
Ellos - Todo va a ser mas grave
Ella - Nada es, tan grave
Ellos -¿Cómo hacemos sin vos?
Ella – Igual que hasta ahora, hace rato que no estoy
.

Líneas fuera de libreto

Ella: Te estaba esperando…
Él: Yo también, pero no lo sabía.
Ella: Ya tengo que irme.
Él: Yo ni siquiera debería estar aquí
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Ella: Podría amarte…
Él: Si, ya sé
Ella: Podrías amarme
Él: También lo sé
Ella: Y no va a pasar…
Él: Así es
Ella: ¿No te da pena saberlo?
Él: Sí, a veces si.
_________________________

Él: Esto no me hace feliz
Ella: Nunca supe que fue lo que sí te hacia feliz
Él: ¿Nunca te lo dije, no?
Ella: Nunca
Él: Perdón…
Ella: De todos modos, ya no importa...

Dialoguito

* Pintura de Gabriel Romero

-Justicia!...Justicia!...-
La llamé a toda voz, desde la vereda de enfrente.
Ella me miró sonriente y me hizo señas de que me cruzase, se sentó en la escalera de mármol envainó la espada, y apoyo la balanza en su regazo.
Me senté junto a ella y deje las cadenas rotas a un costado.
-¿Pesadas, no?- Me preguntó echándoles una mirada. Levanté los hombros.
-Y eso también, ¿no?- le respondí mirando los platos apilados en su falda, llenos de polvo. Solo puso los ojos en blanco.
-¿Cómo te tiene la campaña? Le pregunté mirándola a…la venda.
-Ya sabés que estoy ciega, para mí son todos iguales-
-Pero sorda, no estás.-
-No me lo recuerdes…ya voy a tener que escuchar bastante después de este domingo, siempre se arma revuelo con mi parte “electoral”.-
-Igual, la venda la tenés medio floja, de acá te veo las pestañas.- de dije con sorna.
Ella sonrió y se descubrió un ojo para mirarme.
-Y que querés, si juegan conmigo, joden con la venda como les conviene, tengo un par de "comunicadores", que cada vez que pasan me tocan el culo; el otro día vino uno, de esos con carisma, me toqueteo de tal manera…que me hizo cerrar los ojos. Después me toco decidir si lo dejaban ir o no, le sentí el perfume y me abrí de gambas.-
En ese momento tuve ganas de ajustarle la venda en la cien de manera tal, que se le acomodaran un par de ideas.
-¡Mirá que sos voluble!; igual no digo nada, yo les doy lugar para que se expresen, y se les llena la boca de espuma, defenestran solo a los que les caen mal, y protegen a sus “amigos”, esos que te tocan por detrás.
- ¿Será que no logran conjugarnos?- me dijo mientras se ajustaba la venda como podía.
- Perdoname querida, ¡pero yo no me siento un verbo!-

Preguntas...

¿Por qué no dije lo que sentía en aquel momento?
¿Por qué creí que “hacer lo mejor”, era lo mejor para todos?
¿Para qué salté al vacío con felicidad?
¿Por qué cambio de vida cada 2 x 3?
¿Por qué no hice el cambio de domicilio?
¿Por qué me hago tantas preguntas?

Porque la respuesta es lo menos importante.