Octavo Día
Domingo antes de lunes se edifica a si mismo como un consumado día, con subjetivo tiempo que pende chorreándose lentamente. Síndrome de algo que ya no es, y coexiste; sinergia de algunos hábitos tan ancestrales que no requieren demasiado análisis para ser desenmascarados
En un eterno segundo todo pierde la luz y toma su color verdadero antes de anochecerse, careciendo de sombras; todo queda a la vista cruelmente dibujado en la agónica emisión; entonces las auténticas sombras toman forma.
Sombras rumorosas que invitan al desvelo y fuerzan a los parpados a tornarse.
Estado de Sofrosis que a veces se torna impugnable.
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