Vaciándose
A pesar de esta actividad siento la ausencia, su ausencia. No es extrañar sino, percibir el lugar algo vacío que solía ocupar de vez en cuando; casi todos los días. Es una pena que no pueda compartir algunas cosas como estás simplemente porque no le interesan en lo absoluto, cosa que a me viene bien a veces… que alguien no se interese en casi nada de lo que hago o produzco, más que por cuestiones de cortesía o de tibio interés para quien sus circunstancias poco fascinan.
Una ausencia es un lugar que no puede ser ocupado por algo más, es el hueco en la urdimbre que puede zurcirse, con el que se puede vivir tranquilamente, hasta pacíficamente.
Me pregunto si en vez de ocupar el tiempo-espacio de esta ausencia será una opción habitar esa ausencia en silencio e inactividad para ver de que se trata, pero me da la impresión de que solo se llenaría con analepsis y prolepsis… no quiero llegar al racconto síntoma de la imposibilidad de salir del espacio pretérito que arrastra a la añoranza, a la morriña por ese territorio antes compartido en puntuales circunstancias.
Me agradaría que dejara de ser esta ambigüedad de nombres propios, si eso no significara que este cuidado que me obligo a poner (esto, que pospone) en mí intento de trato, no significara que se terminara de desvanecer ese hilo que siempre percibí débil e inestable. Para ser sincera hice mucho para no perderte de vista, para no sentir que tú lejanía es el preámbulo de una despedida permanente… y sin embargo es constante esta sensación de que estás frecuentemente yéndote, retirándote, alejándote, distanciándote…
Es como siempre estar empezando.
Una ausencia es un lugar que no puede ser ocupado por algo más, es el hueco en la urdimbre que puede zurcirse, con el que se puede vivir tranquilamente, hasta pacíficamente.
Me pregunto si en vez de ocupar el tiempo-espacio de esta ausencia será una opción habitar esa ausencia en silencio e inactividad para ver de que se trata, pero me da la impresión de que solo se llenaría con analepsis y prolepsis… no quiero llegar al racconto síntoma de la imposibilidad de salir del espacio pretérito que arrastra a la añoranza, a la morriña por ese territorio antes compartido en puntuales circunstancias.
Me agradaría que dejara de ser esta ambigüedad de nombres propios, si eso no significara que este cuidado que me obligo a poner (esto, que pospone) en mí intento de trato, no significara que se terminara de desvanecer ese hilo que siempre percibí débil e inestable. Para ser sincera hice mucho para no perderte de vista, para no sentir que tú lejanía es el preámbulo de una despedida permanente… y sin embargo es constante esta sensación de que estás frecuentemente yéndote, retirándote, alejándote, distanciándote…
Es como siempre estar empezando.
4 comentarios:
Más allá de que sea realidad o ficción, posibilidad o certeza, excelente combinación de palabras or whatever, me encantó este pensamiento.
Un beso, Mar, y que tengas un buen día :)
Cha gracias Raquelita.
Es una ausencia que se piensa y mientras tanto se llena de palabras para sentirse menos vacía.
Si te cuento la circunstancias en que lo pensé te cagás de risa por lo banal, je. Pero bueno, contarlo es como que el mago te cuente el truco ¿no?
Te mando besos
Qué loco encontrarlas a las dos acá che!!! andá a saber cuál habrá sido el disparador de tanta ausencia no? y es bueno que no lo cuentes, lo loco es que uno al ser escritor puede hacer un mundo a partir de una miga d epan que se calló de la mesa!! saludos a las dos!!!
MAxi:
Lo raro es que pases dejando huella por acá, ja ja.
Cierto que uno tiende a exagerar un poco,ji...dramatismo no nos falta.
Raramente creo que ya que coincidimos los tres acá como en otras épocas, está bien decir que somos tres que disfrutan del drama en las letras pero nos agota el dramón sostenido en la vida diaria.
"No me gusta el melodrama, para eso me hice escritor"
ja ja ja
Saludos amiguito maximalo.
pd: ¿Te acordás de "MaxiMar"? para mí se fue al carajo.
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